Finaliza la Fase IV del proyecto Mendebaldea

Noticia publicada el

16 de junio de 2023

Se ha calculado la reducción de impactos que supone el proyecto.

Tras su inicio a finales de verano de 2022, se da por culminada la ejecución de la Fase IV del proyecto Mendebaldea que está desarrollando el Parque de Jundiz a modo de ampliación del Anillo Verde hacia el oeste del municipio. El proyecto, que tiene como objetivo la creación de un extenso corredor verde entre el polígono de Jundiz y la Autovía A-1, se está ejecutando en fases sucesivas que presentan una visión en común: restaurar entornos degradados, mejorar la conectividad ecológica y mitigar los efectos del cambio climático.

La Fase IV se centra en la conexión de las Fases I (entorno de Lermanda) y III (entorno de Ariñez) con los núcleos de población y actividad próximos, que corresponden al concejo de Margarita por el norte y al Centro de Servicios de Jundiz (CSJ) y concejo de Ariñez por el sur. Al igual que las demás fases del Proyecto, las actuaciones están cofinanciadas por las subvenciones de impulso al desarrollo sostenible en entidades locales (línea Cambio Climático) del Gobierno Vasco con una dotación, en este caso, de 62.650,19 euros. Además, se contó con un crédito de 35.000 euros gracias a un Convenio de Colaboración entre el Centro de Estudios Ambientales y la Rural-Kutxa que permitió ampliar en 3,5 hectáreas junto al CSJ la superficie de actuación inicialmente prevista.

Tras realizarse en 2022 la limpieza de los terrenos, el movimiento de tierras y la ejecución de los caminos, durante el primer cuatrimestre del 2023 se ejecutaron las siembras y plantaciones, mediante las que se instalaron un total de 25.087 unidades de planta. La mayor parte del esfuerzo se destinó a la forestación de parcelas públicas para, además de mejorar paisajísticamente el entorno, crear bosques sumidero con alta capacidad de fijación de carbono. Para ello, se establecieron cuatro tipologías forestales (encinares, quejigales, bosque de ribera y matorrales), priorizando especies autóctonas en el territorio alavés y se eligieron sus localizaciones según sus requerimientos y características. También se instalaron una serie de setos arbustivos, aromáticos y de ribera con función delimitadora.

Plantación forestal de alta densidad entre el núcleo urbano de Margarita y la A1.

En total, en el entorno de Margarita se destinó una superficie de aprox. 27.603 metros cuadrados para plantación de especies forestales en alta densidad, que también ocuparon 26.272 metros cuadrados de terreno público adyacente a la Autovía A1. En los alrededores del centro de servicios de Jundiz se destinaron aprox. 28.590 metros cuadrados de terreno para la instauración de la masa forestal. Además, se utilizaron 67 individuos de olmos (Ulmus minor) resistentes a la grafiosis en los nuevos caminos ejecutados. Finalmente, durante este período también se realizó un pequeño terraplén junto a la calle Larrangoiti para establecer una zona de compostaje para el pueblo de Aríñez, así como dos pequeñas balsas para favorecer la recuperación de un anfibio amenazado en el País Vasco: el sapo corredor (Epidalea calamita).

Con estas intervenciones concluyen las obras de la Fase IV del Proyecto Mendebaldea. Durante los dos siguientes años se llevarán a cabo labores de mantenimiento para garantizar el correcto arraigo de la vegetación. Para más detalle, se puede consultar memoria justificativa del Proyecto.

Aspecto de una de las balsas temporales ejecutadas en la Fase IV

En cuanto a la reducción de impactos para la lucha contra el cambio climático asociada al Proyecto, se prevé que con todas las actuaciones se alcance un valor de reducción de 224,69 toneladas de CO2/año, que con un período de permanencia de 40 años asciende a un total de 8.022,41 toneladas de CO2.También se pronostica la reducción de la emisión de otros gases contaminantes. Se explican a continuación estos resultados, que pueden consultarse más detalladamente en el Anexo A) Cálculo de reducción de impactos.

La reducción de CO2 se ha logrado gracias a la utilización de materiales reciclados en la obra (áridos y tierras), la absorción por parte de la plantación forestal y por el almacenaje de carbono orgánico en el suelo. Por un lado, a raíz de utilizar 1.589,3 toneladas de áridos reciclados y 1.807,9 toneladas de tierras del propio ámbito de actuación, se ha previsto una reducción de 10,74 y 14,02 toneladas de CO2, respectivamente. Por otro lado, se ha estimado una reducción de 174,17 toneladas de CO2 por año gracias a la realización de las plantaciones forestales en alta densidad (aprox. 25.000 ejemplares en 8,5 hectáreas) que, en un período de permanencia de temporalidad máxima fijado en 40 años, implica alcanzar un valor de fijación de 6.966,94 toneladas de CO2. Finalmente, por almacenaje de carbono orgánico en el suelo se ha calculado una reducción de 19,88 toneladas por año de CO2, que ascienden a 795,07 toneladas en el período de permanencia establecido.

Como resultado de las actuaciones anteriormente mencionadas, también se han reducido las emisiones a la atmosfera de otros gases contaminantes. En concreto, mediante la utilización de áridos reciclados y de tierra del ámbito se ha evitado la emisión de SO2, PO4, C2H2 y CFC-11. Además, la instalación de planta forestal ha contribuido en a la fijación de gases atmosféricos como el SO2, O3 y NO2 y de partículas en suspensión de tipo PM10.Se ha calculado que la reducción anual de estos contaminantes es la siguiente: 0,21 toneladas de SO2, 0,04 toneladas de PO4, 0,06 toneladas de C2H2, 0,000006 toneladas de CFC-11, 0,152 toneladas de O3, 0,254 toneladas de PM10 y 0,131 toneladas de NO2. Teniendo en cuenta el compromiso adquirido de un período de permanencia de las plantaciones mínimo de 40 años, se prevé que por fijación vegetal y almacenamiento en los suelos forestales se alcancen valores de reducción de 3,01 toneladas de SO2, 6,09 toneladas de O3, 10,15 toneladas de PM10 y 5,245 toneladas de NO2.

Nuevo camino ejecutado en el CSJ con materiales reciclados y uso de olmos resistentes a la grafiosis como arbolado de alineación.

Los valores de reducción obtenidos a raíz de las actuaciones realizadas en la Fase IV del Proyecto Mendebaldea permiten afirmar, por tanto, que contribuyen a incrementar la sostenibilidad del territorio en el contexto del vigente Plan de Lucha Contra el Cambio Climático del Gobierno Vasco.